Extremadura sigue preparándose para acoger refugiados procedentes de la guerra en Ucrania. La Junta pondrá en marcha un listado para que las familias que quieran acoger se apunten. También se han habilitado 60 camas en distintos hospitales para heridos de guerra y 120 plazas en centros de menores para niños que vengan solos.
Pero las iniciativas llegan también a numerosos pueblos de la región. En Olivenza, por ejemplo, el Ayuntamiento habilitará un centro para acoger al menos a sesenta adultos ucranianos. Será en el albergue municipal y se convertirá en el primer centro de refugiados en la región.
La Junta ha elegido el municipio oliventino ya que la Ley de Extranjería obliga a que sea cerca de la ciudad de destino, que en este caso será Badajoz, para "evitar desplazamientos innecesarios". El objetivo es ofrecer a estas personas que huyen de la guerra "una primera fase de asilo o refugio cuando vengan".
Tras esta primera acogida, el siguiente paso es coordinarse con la Federación de Municipios y Provincias de Extremadura para que esas personas puedan vivir en otras localidades de la
comunidad autónoma. Además, se trabaja en un servicio de reagrupamientos familiares para que pueden venir a la región los que tengan algún familiar.
Madrigalejo también ofrece su albergue
En la misma línea, el Ayuntamiento de Madrigalejo ha puesto hoy a disposición del gobierno regional el albergue municipal para acoger a las personas que huyen de la guerra. “Hemos comunicado a la Junta de Extremadura y puesto a disposición nuestras instalaciones del albergue municipal con 40 camas, por si les fuera necesario para acoger a refugiados ucranianos”, ha manifestado a Efe el alcalde de Madrigalejo, Sergio Rey.
El regidor madrigalejeño ha estimado que dadas las circunstancias y el éxodo de refugiados que está provocando la guerra en Ucrania “es prioritario ayudar en todo lo que está en nuestra mano y con los recursos que tenemos”.
El albergue municipal ya dio cobijo durante la pandemia a los trabajadores (nueve mujeres y un hombre) de los pisos tutelados de Madrigalejo, que optaron por un aislamiento voluntario de 40 días en este espacio para evitar contactos con otras personas durante el periodo de vacunación.
El objetivo era evitar que la covid-19 pudiera afectar a alguno de los 23 usuarios mayores a los que asisten en los pisos tutelados en el periodo comprendido entre la primera y segunda dosis de la vacuna.
Extremadura elaborará un listado de familias dispuestas a acoger refugiados ucranianos