La compañía Iberdrola tiene previsto poner en marcha en la localidad cacereña de Cedillo la primera comunidad solar de España para un pueblo completo, de tal forma que sus habitantes podrán conseguir un ahorro del 50 % en su factura de electricidad.
Para ello, la compañía instalará pequeñas plantas fotovoltaicas con una potencia conjunta de 340 kW en las cubiertas de dos instalaciones municipales y en un terreno cedido por el Ayuntamiento, según ha anunciado este viernes en un comunicado.
Iberdrola asumirá la inversión total del montaje y gestión de este sistema de autoconsumo colectivo, que se pondrá en funcionamiento a principios de 2023.
Con esta iniciativa el grupo pretende contribuir al desarrollo de esta localidad, hacer frente a la despoblación y atraer a nuevos habitantes al municipio, según ha destacado la mercantil, que ha aclarado que los nuevos empadronados podrán beneficiarse de esta medida durante los próximos cinco años.
El acuerdo para llevar a cabo este proyecto, que cuenta con el apoyo de la Junta de Extremadura, ha sido suscrito por el alcalde de Cedillo, Antonio González; y Nicolás Antón, responsable de Iberdrola Renovables en Extremadura.
En este sentido, la consejera para la Transición Ecológica y Sostenibilidad, Olga García, ha calificado el proyecto como "una muy buena práctica que incentiva el desarrollo rural y hace partícipe a todo un pueblo de los beneficios y las oportunidades que ofrece el despliegue fotovoltaico, que debe ser solidario al máximo con las localidades donde se ubica contribuyendo así a afrontar el reto demográfico".
Por su parte, Antonio González ha explicado que "la inversión, el empleo y los impuestos generados por los proyectos renovables de Iberdrola garantizan que este pueblo no va a desaparecer en el corto plazo".
Iberdrola ha destacado que la localidad de Cedillo es una muestra de la contribución de las energías renovables al desarrollo sostenible de las zonas rurales.
Así, en esta localidad pondrá en marcha en las próximas semanas dos instalaciones fotovoltaicas con una potencia conjunta de 100 MW.
Para minimizar su impacto ambiental en el entorno del Parque Natural del Tajo Internacional, un área protegida entre España y Portugal, Iberdrola ha acometido una compleja solución para evacuar de forma conjunta la energía producida por estas plantas fotovoltaicas y la central hidroeléctrica de casi 500 MW ubicada también en el municipio.
Como parte de esta iniciativa, la compañía ha instalado una subestación encapsulada de solo 300 m2 -frente a los 10.000 m2 de terreno que suelen necesitar- que minimiza su afectación al entorno.
Su construcción ha supuesto un importante desafío logístico, según Iberdrola, ya que ha sido transportada íntegramente desde Italia hasta España.
Esta innovadora infraestructura también dará servicio a una tercera planta fotovoltaica, de 375 MW, lo que evitará la instalación de nuevas redes de evacuación.
Esta última instalación, que ha sido respaldada por el Ayuntamiento y la Sociedad Agraria de Cedillo, se encuentra en fase de tramitación ante el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
La planta se ubicará en una finca comunal propiedad de gran parte de los vecinos del municipio, que podrán continuar con su actividad ganadera.
Una subestación eléctrica al completo, desde Italia hasta Cedillo