Ejercita el cuerpo, y sobre todo la zona abdominal. También mejora la postura de la espalda y fortalece el suelo pélvico. Además, reduce el estrés y mejora la autoestima. Estos son solo algunos de los beneficios que se asocian a la danza del vientre. En nuestra visita al barrio de Moctezuma hemos conocido a Noelia, más conocida como Ney, una profesional de la danza que ha vuelto a su barrio para alejarse del estrés y recuperar la ilusión que había perdido en el camino. Con ella hemos conocido a algunas de las integrantes de su clase de danza del vientre, que actualmente hace de manera online, y nos han sorprendido con este baile.

No hay persona que pueda resistirse al olor que sale de "Jacinto", una multitienda del barrio Moctezuma especializada en la elaboración de paninis. ¡Pero qué paninis! Vienen vecinos del barrio, de la localidad y hasta de pueblos de alrededor. ¿Quiéres saber cuál es el que más piden? Nos lo cuenta Carlos.

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"Febrero, febrerín; el más corto y el más ruín" El segundo mes del año tiene la mala fama de loco, caprichoso y traicionero. Es muy variables desde el punto de vista meteorológico. Así, le puede dar por hacer un frío de mil demonios a pasar a las mangas de camisa; le puede dar por llover o por no caer ni una sola gota. Vamos, que un febrero normal, ni lo ves ni lo verás. Hacemos un breve repaso al refranero. 

Una de las cosas que nos ha quedado clara en nuestra visita al barrio gótico de Valencia de Alcántara es que hay mucho arte en estas calles. Fruto de este arte es esta actuación flamenca que nos han ofrecido ¡dentro de la sinagoga judía del barrio! No os lo podéis perder.

Cuántas veces os han dicho que no se pueden tocar las piezas de un museo. Os presentamos una exposición en la que se permite conocer el arte a través de las manos. Con cuadros en relieve, paneles en braille y la descripción de las audioguías, las personas ciegas podrán disfrutar de algunas de las obras más representativas del Museo del Prado. Además invita al público a conocer la realidad de una persona con discapacidad visual.

Abrió en el 2015 en La Zarza y desde entonces lleva una floristería. La separación de su pareja y el paso por una enfermedad le llevó a estudiar una carrera que siempre había querido: interiorismo. Así fue como Toñi abrió su propio negocio.