Hoy la protagonista es la ciudad de Plasencia, que será la sede de Las Edades del Hombre en 2022. Hacemos una visita guiada a través de la judería hasta sus dos catedrales. Para descansar proponemos una antigua casa palaciega reconvertida en hotel y degustamos uno de los productos estrella de estas tierras: las setas. La escalada, practicada en un espectacular rocódromo, se convierte en un plan de ocio perfecto. Y finalizamos la jornada visitando Piornal y su Museo del Jarramplas, una de las fiestas más auténticas de la comunidad.

Ponemos a prueba nuestros vértigos con una actividad alternativa que mezcla ocio, deporte y superación en el Rocódromo Cereza Wall de Plasencia. 

Un plan perfecto para realizar con familia, amigos o en pareja: la escalada. Y no tenemos que preocuparnos por el tiempo que hará, ya que llueva o haga un sol imponente nuestra diversión está asegurada porque Cristina nos espera para pasar una tarde muy divertida en su rocódromo.

Hacemos parada para comer en el Restaurante Succo de Plasencia para probar uno de los productos estrella de la tierra: las setas que crecen a la sombra de encinas, castaños, pinos y robles de las comarcas de La Vera, el Ambroz o Las Hurdes. Elegimos este restaurante junto a la Plaza Mayor, donde David nos va a preparar unos boletus en textura. 

 

La primavera de 2022 será un momento idóneo para visitar Plasencia. 

Y es que su Diócesis acogerá la vigésimo sexta edición de Las Edades del Hombre. Esta prestigiosa muestra de Arte Sacro, que aborda la Historia de la Humanidad desde una perspectiva religiosa, se sumará así al atractivo turístico de la Capital del Jerte.

Ismael Martín, de la Oficina de Turismo, nos acompaña en nuestro viaje y nos realiza una visita guiada por la ciudad. 

Nuestra ruta por la ciudad comienza visitando algo de lo que pocas ciudades pueden presumir: dos catedrales. Visitamos el acueducto de esta urbe abrazada por el río Jerte  y el legado que nos dejó la cultura judía, que podemos contemplar paseando por la judería.

A unos 30 kilómetros de Plasencia, nos dirigimos a la localidad más alta de Extremadura. A casi 1200 metros de altitud, Piornal es puente entre el valle del Jerte y la Vera.

Se encuentra en plena sierra, rodeado de robles, castaños y piornos, los arbustos que prestan su nombre al pueblo. Esto provoca una fresca climatología que ha contribuido a crear fachadas y muros de piedra, granito y otros elementos. 

De la mano de Celia, visitamos un museo dedicado al Jarramplas, una fiesta declarada de Interés Turístico Nacional en la que cada 19 y 20 de enero Piornal celebra una curiosa mascarada.

Conoceremos una de las partes más representativas del museo: la colección de máscaras, que abarca desde los años 80 hasta la actualidad y donde se ve cómo ha evolucionado su construcción. 

Nos sorprende una figura del Jarramplas a tamaño natural que nos permite apreciar el colorido de su traje.

 

En Plasencia, en el antiguo barrio judío, podemos encontrar una antigua casa palaciega de finales del siglo XVI, restaurada en 2012 y declarada Bien de Interés Cultural, donde vamos a alojarnos durante nuestro viaje por tierras placentinas.

Y es que este edificio que perteneció a la familia Carvajal Girón y que aún conserva su fachada original, es ahora un hotel que vamos a descubrir junto a Anna: el Hotel Palacio Carvajal Girón. Además, mantiene los espacios originales como el patio, donde ahora encontramos la cafetería. 

Una cuidada decoración que invita al descanso. 

 

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