El vocalista de Tam Tam Go, Nacho Campillo, hizo disfrutar a cerca de 200 seguidores en el Auditorio del Parque del Príncipe Cáceres de algunos de los éxitos más conocidos de la banda extremeña.
La nueva normalidad exigió distancia entre sus fans. La organización separó a cada grupo del resto con al menos el espacio de dos asientos y restringiendo los movimientos, pero eso no les impidió disfrutar de un ambiente íntimo y casi privilegiado en un concierto especial también para el artista, el primero después de la pandemia.
De hecho el cantante se sinceró con su público y dedicó emocionado la primera canción a su padre, fallecido a causa de la pandemia. Después mezclaría algunos de sus éxitos como Manuel Raquel, o Atrapados en la Red, con otros inéditos y que irán en su próximo disco. La música traspasó los asientos de distancia y volvió a dar normalidad a las noches de verano cacereñas.