Las almendras de Extremadura se enfrentan a un año de buena cosecha, con una producción que se estima alcanzará casi las 6.000 toneladas, lo que supone un incremento del 20% respecto al año pasado. Este aumento se debe en gran parte a la expansión de la superficie cultivada, que ha crecido hasta las 12.000 hectáreas, casi 3.000 más que en la campaña anterior. Este crecimiento se ha impulsado principalmente por las nuevas plantaciones de regadío en la región.
En una finca de Badajoz, la recolección ya ha comenzado en 80 hectáreas de secano, un proceso que se espera completar en unos 20 o 25 días. Según Miguel Ángel Sánchez, ingeniero agrícola, "esta campaña es bastante más alentadora que la anterior, puesto que las producciones han crecido en todas las variedades y los rendimientos también están siendo mayores".
Extremadura es actualmente la comunidad autónoma que más ha aumentado su superficie plantada de almendra en toda España. Juan Metidieri, presidente de Apag Extremadura Asaja, atribuye esta expansión a los "años de bonanza" que el sector ha experimentado recientemente, lo que ha motivado a los agricultores a seguir invirtiendo en este cultivo.
Miguel Ángel Sánchez destaca la importancia de mantener la producción: "Siempre intentamos seguir en esa dinámica y si no podemos plantar nuevas explotaciones, por lo menos, replantar las que ya van siendo más viejas y menos productivas".
Recuperación de las almendras de Extremadura
Tras un periodo difícil, donde algunos agricultores optaron por arrancar sus explotaciones, el cultivo de almendra ha comenzado a recuperarse. Con un aumento del 25% en el precio de la almendra, el mercado se muestra más optimista.
Aunque las jornadas de recolección comienzan a las 3:40 de la mañana, el proceso ha cambiado mucho en los últimos años. Manuel Corbacho, tractorista, recuerda que "hace 20 años se cogía todo a mano, con personal, y se tardaba mucho más. Ahora, donde echamos 20 días, antes se tardaba dos meses".