Campamento Dignidad Mérida sigue sin tener respuesta de la Seguridad Social. Este colectivo reclama por segunda semana consecutiva ser recibidos por los responsables de zona de la Seguridad Social para hablar de la gestión y agilización a la hora de conceder el Ingreso Mínimo Vital. Según su portavoz, Juan Viera, aún no les ha contestado nadie de ese organismo y algunos trabajadores sociales les dicen que todavía deberán esperar otro medio año para que llegue ese ingreso a muchos de sus peticionarios.
Una situación que se agravará el mes que viene, pues muchos demandantes son jornaleros del campo que se han quedado sin empleo por la mala cosecha de la aceituna de aceite. Un mes, el de diciembre, que va a ser muy difícil si se suma la pandemia y el aumento de los gastos debido a las fiestas navideñas. Unos gastos inasumibles para muchas de estas familias.