Ante la falta de mano de obra en la construcción, a partir de este lunes el sector podrá contratar a trabajadores de otros países. Hablamos de albañiles, fontaneros, carpinteros o electricistas. Se calcula que hacen falta hasta 900.000 de estos trabajadores en todo el país, unos 10.000 en Extremadura. Las empresas dicen que no queda otra, pero los sindicatos dudan de que esta sea la única solución.
Actualmente, en nuestro país, el 20% de la mano de obra que trabaja en la construcción ya es extranjera, señalan desde la Confederación Extremeña de la Construcción. Un dato que su secretario general Joaquín Sánchez, no tiene duda de que irá en aumento
Para atender esta necesidad de mano de obra, el gobierno acaba de ampliar el catálogo de ocupaciones de difícil cobertura con profesiones relacionadas con la construcción, que incluye albañiles, capataces de obra, fontaneros o carpinteros. Los responsables del sector de los sindicatos esperan que esto no conlleve un abaratamiento de la mano de obra y piden extremar los controles.
Además, aseguran que parte de la solución pasa por mejorar las condiciones laborales y salariales de trabajo. Y también por mejorar la cualificación de estos profesionales y la oferta formativa de estas profesiones.