El deterioro del Centro de Salud “Los Pinos” es visible tanto desde el exterior como desde el interior, con grietas desde hace años en salas y consultas, a las que se suman problemas en la estructura y cimentación.
“Día a día es notar la vibración, que entren los pacientes y digan "has visto la grieta". El problema es cuando llueve y el miedo a que se perfore. El edificio está dañado por todos lados”, señala la directora médica del centro, Margarita Moreno.
Algunas fisuras en pediatría están incluso monitorizadas, otras zonas clausuradas como esta entrada, y los aparcamientos apuntalados.
“Se ha caído una zona que está apuntalada. Estamos deseando irnos cuanto antes, con el miedo de que caiga un cascote”, afirma la jefa de administración, Piedad Hernández.
Problemas que comprometen la seguridad, aseguran sanitarios y pacientes, que creen necesario el traslado cuanto antes.
Tras años de espera y barajar varios espacios, el próximo año se trasladará de manera provisional al Palacio de Congresos, ubicado a 150 metros, hasta su ubicación definitiva dentro de unos años en el Hospital Provincial.
Las obras de remodelación del Palacio comenzarán en primavera.