Llevamos muchos días hablando de la falta de agua en el campo y sus consecuencias. Hoy, en el programa Ahora Extremadura, hemos querido poner cifras. Según la organización agraria La Unión Extremadura, más de 200.000 hectáreas de cultivo de invierno se han marchitado por la sequía, con una pérdida de alrededor de los 240 millones de euros.
José Miguel Coleto, catedrático de la Universidad de Extremadura, nos ha atendido en directo. Le hemos preguntado sobre las consecuencias económicas de la sequía, y él no ha explicado que en 2022 se dejaron de facturar en torno a 150 millones de euros en la agricultura extremeña, y en el caso de la ganadería las pérdidas ascendieron a unos 100 millones.
Aunque, aclara, habría que determinar qué parte de esos importes se debe achacar directamente a la sequía, y qué otra parte a la situación socioeconómica internacional, marcada por la inflación.
Según los datos adelantados del Ministerio de Agricultura, apunta también Coleto, la renta agraria sufrió el año pasado una reducción del 5,5% en el conjunto nacional.
Sequías cada vez más frecuentes
El Consejo Social y Económico de la región están elaborando un informe sobre las consecuencias socioeconómicas de la sequía meteorológica.
Coleto recuerda que "científicamente está probado que estos fenómenos, desgraciadamente, cada vez van a ser más frecuentes". Y afirma que la principal conclusión del informe sería que "la agricultura de regadío es la única que en estas condiciones tiene un futuro claro", y por tanto "hay que seguir apostando por ella".
Respecto a cultivos concretos que demandan mucha agua como el arroz o el maíz, y preguntado sobre si están condenados a desaparecer en Extremadura, este catedrático opina que no.
"La investigación tiene mucho que decir" para optimizar el empleo de agua en la agricultura, como el cultivo de arroz semisumergido; y en el caso del maíz, la mejora genética "ha conseguido aumentar extraordinariamente la eficiencia hidráulica: "ahora con un metro cúbico de agua somos capaces de producir casi el doble de maíz que en los años 80".
Además hemos preguntado a Coleto sobre el uso de los pantanos en los años futuros.
"En Extremadura yo no veo otra opción: la forma de tener agua es embalsarla"
También nos ha dado su opinión sobre el embalse de Valdecaballeros, que el Gobierno tiene intención de desmantelar, y sobre proyectos del tipo de Elysium City.
Entrevista completa en el vídeo de arriba.