Las gasolineras intentan remontar tras 3 meses al límite de su viabilidad. El presidente de la Asociación de Estaciones de Servicio de Extremadura, Fernando Mena, asegura que durante el estado de alarma "muchos compañeros lo han pasado muy mal y las consecuencias las van a sufrir mucho tiempo". En el informativo Primera Hora, de Canal Extremadura Radio, ha explicado que al ser declaradas bien básico las gasolineras tuvieron que abrir desde las siete de la mañana hasta las doce de la noche "facturando entre un 5 y un 10 por ciento de lo habitual".
"Hemos llegado a facturar entre un 5 y un 10 por ciento de lo habitual"
La situación más delicada se ha vivido en las zonas rurales,donde apenas se ha registrado actividad. Además muchos de sus servicios complementarios, como tiendas o lavacoches, apenas han tenido demanda. A pesar de todo, en la región "no ha cerrado nadie" y el sector confía en que con la entrada en la nueva normalidad "esta semana se pueda llegar al cien por cien" de lo que se trabajaba antes de la crisis sanitaria, por lo que descartan que se vayan a tener que prologar sus ERTE.
Respecto al futuro, Mena reconoce que hay muchas incertidumbres debido a la expansión del coche eléctrico o la reducción del uso de los combustibles de origen fósil: "Esto va tan deprisa que no sabemos hacia donde tiraremos", asegura, aunque hay una cosa que tiene clara: el sector cambiará.