La Consejería de Transición Ecológica prepara un decreto para revisar las zonas protegidas de la región. En concreto revisaría 69 de las 71 zonas ZEPA de la región y 12 de los 89 lugares de interés comunitario.
Entre las 69 zepas están las 19 declaradas en núcleos urbanos para la conservación del cernícalo primilla. También la ZEPA Llanos de Cáceres y Sierra de Fuentes, de la que se quedaría fuera el Cerro Arropé donde se plantea el gran centro budista. Y la ZEPA del embalse de Valdecañas, aunque, en este caso, no afectaría al complejo turístico, cuyo futuro sigue en el Constitucional. La Junta ha sacado a exposición pública este decreto, que deberá contar con el visto bueno de Europa para ser una realidad.
La Red Natura en Extremadura tiene una extensión de un 1.264.000 hectáreas. Algo más del 30% de la superficie regional. Los cambios son mínimos comparado con esas cifras: 3.000 hectáreas que dejarían de tener esa protección.
El catedrático de ordenación del territorio en la UEX, Julián Mora Aliseda, cree que se ha desaprovechado la ocasión para hacer una delimitación más rigurosa, de tal manera que se protejan sólo los espacios que realmente tienen valor ecológico.
La postura de los ecologistas
Antonio Díaz, de Adenex, está de acuerdo con limitar las zonas ZEPA en algunos entornos de ciudades y pueblos que además de coartar su desarrollo, no tienen especial importancia ambiental al ser zonas con presencia humana; sin embargo creen que no debería haber recortes donde solo hay naturaleza.
Por su parte, el coordinador de Ecologistas en Acción en Extremadura, Ricardo Sosa, va más allá. Dicen que no solo no hay informes científicos, si no que además se prepara el terreno para posibles agresiones al medio natural.
Las modificaciones dejarían sin protección zonas como el Cerro Arropé, donde se construirá el complejo budista; en Valdecañas se retocarían los límites, si bien, no afectarían al complejo turístico, cuyo futuro está en manos del Tribunal Constitucional.
Para la fase de consultas hay un plazo de quince días hábiles. Después el proyecto de decreto se someterá a información pública y se informará del mismo al Consejo Asesor de Medio Ambiente. Tras esto será el turno para su aprobación en el Consejo de Gobierno y así poder ser remitido al Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico a efectos de su traslado a la Comisión Europea para su aprobación definitiva.
La Junta reducirá la superficie de las zonas ZEPA en Extremadura