Los precios del alquiler se han disparado en los últimos meses en Extremadura. En enero de 2022 el metro cuadrado en la región tenía un valor de 5’5 euros. Y cerró en diciembre de 2023 en 6’3 euros.
Si nos paseamos por las grandes ciudades de la región, el precio sube en todas. Llama la atención el caso de Plasencia, la localidad donde más se ha encarecido el suelo: un 8,5%.
Sin viviendas para alquilar
Por eso cada vez cuesta más encontrar carteles de alquiler en las inmobiliarias. No hay viviendas para alquilar en el mercado extremeño y la primera consecuencia es la subida disparada de precios.
"En la ciudad de Cáceres hay barriadas donde podemos hablar de subidas de hasta el 33% respecto a enero del año pasado", asegura Francisco Marroquín, presidente del Consejo autonómico de los agentes de la propiedad.
Los altos precios provocan también que el mercado inmobiliario esté estancado. Los inquilinos que ya tienen piso prefieren quedarse como están, aunque renuncien a más comodidades. "Si ahora pagan 500 euros y ven que fuera están a 800 euros, se aguantan con lo que tienen, y no se mueven", confirma Francisco Marroquín.
Propietarios más exigentes
Y los que buscan alquilar por primera vez, se encuentran con propietarios que cada vez ponen más exigencias. O directamente no alquilan, por miedo a la nueva ley de vivienda que protege a los inquilinos.
"Ante cualquier impago es muy difícil de echar a un inquilino que no paga y los propietarios tienen miedo y por eso están quitado sus viviendas del mercado de alquiler", asegura Juan Alberto Carretero, dueño de dos inmobiliarias y presidente de UNIBA, la Unión de Inmobiliarias de Badajoz.
Porque además la nueva ley de vivienda pone tope a las subidas de alquiler. "El año pasado se limitó la subida al 2%, en 2023 solo se podrá subir el precio un 3% y para 2025 ya se verá porque no está vinculado al IPC" asegura el abogado Fernando Cumbres.
Recomiendan contratar seguros
Las inmobiliarias creen que aunque se regule el mercado, el gobierno debería dar más libertad a dueños e inquilinos para llegar a un acuerdo. También recomiendan a los propietarios ampliar los contratos con seguros y avales para protegerse en caso de que se produzca un impago por parte del inquilino.
