La futura ley de vivienda recibirá, previsiblemente, el visto bueno del consejo de Ministros hoy martes. Comienza su andadura y el camino para su aprobación final será también largo.
Esta normativa para regular el mercado prevé límites de precios en zonas tensionadas. "En Extremadura no hay zonas tensionadas", opinan los presidentes de los colegios oficiales de agentes de la propiedad, Francisco Marroquín de Cáceres y Adolfo del Molino, de Badajoz.
Es zona tensionada cuando la hipoteca o el alquiler, con los suministros, supera el 30% de los ingresos medios de la zona. Serían las comunidades autónomas quienes las determinen. Por ejemplo: un nuevo contrato de alquiler tiene que respetar el precio del anterior.
Aplacar las subidas de precios
Para grandes tenedores, los que tienen diez o más propiedades, se aplicarán precios de arrendamiento de referencia. "Intentar poner un precio por ley es como poner puertas al campo, no es constitucional", nos cuenta Marroquín. Misma opinión que la de su colega de Badajoz, Adolfo del Molino. "Es una ley complicada de desarrollar y a nuestro entender, electoralista", asegura.
"Intentar poner un precio por ley es como poner puertas al campo". "Es una ley complicada de desarrollar y a nuestro entender, electoralista"
Los colegios apuestan por una mayor inversión del Estado en la construcción de viviendas para arrendamiento, y aumentar la eficiencia energética y la rehabilitación. La ley obligará a reservar el 30 % de las nuevas promociones a vivienda de protección oficial. La normativa también plantea un recargo del 150 % del IBI para pisos vacíos de grandes propietarios. Muchas de las medidas que contiene el texto no se aplicarán hasta 18 meses después de su aprobación, por lo que se supone que hasta 2024 o 2025 no veremos sus primeros efectos.