El año 2025 plantea retos clave para la economía extremeña, uno de ellos es la falta de mano de obra migrante. Mientras España se beneficia del aporte laboral extranjero, Extremadura va en sentido contrario, lo que puede lastrar parte de su crecimiento potencial.
En el último año la creación de empleo en España ha estado significativamente marcada por la participación de trabajadores extranjeros. De los 377.000 empleos generados hasta el tercer trimestre, el 48% correspondió a trabajadores extranjeros, el 43% a empleados con doble nacionalidad y solo el 9% a empleados españoles. En Extremadura, la situación es la contraria según Miguel Cardoso, economista jefe de BBVA Research.
Falta de mano de obra en el sector agroalimentario
Esta tendencia afecta a sectores clave como el agroalimentario, donde la falta de mano de obra está empujando a las empresas a intensificar la automatización. Sin embargo, hay sectores, como la hostelería o los cuidados, que no pueden adaptarse de esta manera. Y si no se cubre la demanda de empleo, se pierde crecimiento.
Según Cardoso, para garantizar el crecimiento y atender las necesidades de una población envejecida, para Extremadura es esencial incrementar la llegada de migrantes que compense el déficit demográfico.