"Vivíamos en un bloque de viviendas. Un día, cuando bajamos a la puerta, nos encontramos con el coche rayado con el mensaje " gitano vete ya o paga", cuando nosotros no debíamos nada". Es la dura experiencia por la que tuvieron que pasar Zaida Montañés y su familia de etnia gitana acosada por sus vecinos. Ocurrió en 2020 en Badajoz y su caso todavía está en manos de la justicia, pero no es el único.
24 casos en 2020
Ese año se denunciaron ante la Fundación Secretariado Gitano de Extremadura 24 casos por discriminación contra la comunidad gitana. Ocho de ellos relacionados con el acceso a bienes y servicios y cuatro relacionados con la vivienda. Pero son muchos más de los que se denuncian. "Primero por el desconocimiento de cuáles son los cauces que llevar, pero también porque el colectivo gitano tiene tan interiorizado que sufren discriminación que lo ven como algo natural que les debe pasar en sus vidas", asegura Mercedes Moreno, secretaria territorial de la Fundación Secretariado Gitano en Extremadura.
"Tienen tan interiorizada la discriminación que lo ven como natural"
Según el informe, en 2020 hubo en Extremadura tres casos de discriminación a personas gitanas a la hora de acceder a un empleo, otros tres relacionados con servicios policiales y dos en centros educativos.
Más casos de odio tras la pandemia
El informe recoge además que la pandemia ha provocado a nivel nacional un aumento de los casos de discriminación y de delitos de odio en los medios de comunicación y las redes sociales. "Durante toda la pandemia se estado vinculando a la población gitana con la propagación del virus, con el incumplimiento de medidas sanitarias impuestas por el COVID y eso a su vez ha provocado que aumenten los discursos de odio por parte de los propios lectores de esas noticias", asegura Iris González, técnico de igualdad de la Fundación Secretariado Gitano de Cáceres.
La Fundación tramitó 364 casos por discriminación a la comunidad gitana a nivel nacional durante el año 2020.