Nueva jornada de paros en el transporte. El sector continua con sus reivindicaciones y los piquetes informativos intentan que ningún camión trabaje durante las protestas.
El balance de daños deja varios sucesos relevantes hasta el momento en la región. La Policía Nacional ha confirmado la detención de un hombre de 47 años por apedrear a un camión durante la madrugada del martes al miércoles. Ayer, un camión de la farmacéutica Cofares sufrió otro ataque por un "piquete incontrolado" a la altura de Mérida. Actuaciones que se empiezan a notar ya en sectores como la alimentación, la farmacia o la industria.
Hoy la situación amanece más tranquila. En el Polígono El Prado de Mérida la escolta policial ha aumentado ante la petición de protección por parte de algunas de las empresas afectadas. Numerosos camiones cisternas cargados de combustible han salido escoltados desde las seis de la mañana. Cerca de ellos, los piquetes denuncian que no se les permite desviar a los camiones para informarles de los motivos de la huelga, se quejan del trato policial y lamentan que se está "desviando el foco de lo importante".
También en Plasencia el día comienza más tranquilo tras las intensas protestas de ayer. Decenas de camiones se quedaron paralizados en Plasencia más de nueve horas por la actuación de los piquete, con quema de neumáticos en el acceso al polígono incluida. "Vamos a seguir mañana, pasado y a todas horas hasta que nos hagan caso; estamos hartos de pagar impuestos a diestro y siniestro y que suba todo", resumía uno de los piquetes placentinos.
En Casar de Cáceres, a pesar de que la Federación Nacional de Industrias Lácteas ha anunciado que suspenderá su actividad a partir de hoy, la central lechera de la Cooperativa Cooprado mantiene su funcionamiento con normalidad y, de momento, con servicios regulares.