Los bares y discotecas de Extremadura reclaman más horas de fiesta, argumentando que los horarios de cierre actuales están provocando la fuga de jóvenes a otras comunidades donde el ocio nocturno se extiende hasta más tarde. Desde la federación que agrupa a estos establecimientos, alertan de que la noche extremeña es la primera en cerrar en toda España, con la mayoría de los locales apagando las luces a las cuatro y media de la madrugada, salvo excepciones en verano, cuando se permite una hora más.
Los propietarios piden a la Junta de Extremadura que apruebe una nueva normativa que les permita mantener los locales abiertos hasta las seis de la mañana. Sostienen que esta medida no solo beneficiaría a sus negocios, sino también a los vecinos de zonas como La Madrila en Cáceres, ya que, según ellos, el ruido sería menor si la gente permaneciera más tiempo dentro de los locales en lugar de salir a las calles.