Los autónomos y las pymes de la región se quejan de las consecuencias económicas que tiene para sus negocios el hecho de tener que guardar cuarentena obligatoria cuando se es contacto estrecho, pero no se está contagiado.
También, los días que hay que permanecer aislados hasta que las autoridades sanitarias comunican el resultado de la PCR.
Más rapidez en la comunicación de resultados
La responsable de ATA (Asociación de Trabajadores Autónomos de Extremadura), Raquel de Prado, ha explicado que los días que un autónomo se queda en casa no tiene más remedio que cerrar las puertas de su negocio. Una circunstancia que asfixia a muchos pequeños empresarios, a los que no les salen las cuentas a final de mes. Por eso, algunos trabajadores por cuenta propia, como los transportistas, han tenido incluso que cambiar de domicilio para no estar en contacto con los convivientes positivos y poder volver al trabajo.
Situación parecida se produce en el campo. Según la organización agraria ASAJA Cáceres, campañas inminentes, como la de la recogida de la aceituna, peligrarían por la merma de mano de obra en cuarentena. Piden, en este sentido, rapidez en la comunicación de las pruebas PCR y que la Delegación del Gobierno arbitre un sistema que no ponga en riesgo las campañas venideras.