Llega el tiempo otoñal, la bajada de temperaturas y apetece comer calentito. Una de las tradicionales estampas cuando va entrando el frio son los puestos de castañas asadas. Unos puestos que ya hemos empezado a ver por las calles extremeñas.
Una estampa muy extremeña
Algunas castañeras y castañeros tienen por costumbre gritar a los cuatro vientos su mercancía. Cuando ese sonido comienza a inundar las calles, a muchos la boca se les hace agua. En Cáceres hemos hablado con David Corcho, emeritense que lleva más de una década vendiendo castañas. Ahora le podemos encontrar en la capital cacereña.
Una forma de combatir el frío
Hasta el puesto de David en plena calle San Pedro no dejan de llegar amantes de este superalimento cuyo precio oscila entre los 3 y 10 euros el kilo. No solo atrae su sabor, con el frío se disparan las ventas.
Si no lo han hecho ya, recuerden que hasta el 15 de enero podrán disfrutar de estas castañas asadas a fuego lento.
Arranca la campaña de la castaña con buenas previsiones en calidad y cantidad