Los cines extremeños reclaman la vuelta de las palomitas y los refrescos a las salas mientras estamos disfrutando de una película. Se suman así a la solicitud de la Federación de Cines de España para que se permita de nuevo tomar alimentos en esos establecimientos. La vacunación avanza, los contagios bajan y ya se puede consumir en el interior de la hostelería, por lo que los empresarios de la región no entienden que aún se vete este hábito en nuestra comunidad y en otras cuatro.
Una petición que hace suya el responsable de los Cines Victoria en Mérida y Almendralejo, Juan Villegas: "No entiendo por qué en un bar se puede comer y beber mientras ves la televisión y en un cine no", lamenta.
"No entiendo por qué en un bar se puede comer y beber mientras ves la televisión y en un cine no"
La venta de bebidas y aperitivos en un cine puede suponer el 50 % de su recaudación diaria, por lo que su regreso supondría el aumento de la facturación de estos negocios y rescatar a trabajadores del ERTE. La Federación de Cines de España añade que durante la pandemia no se ha detectado ni un solo brote procedente de una sala de cine y ha incidido en que comer alimentos en un cine es una actividad segura.
Asimismo, consideran que una sala de cine es un espacio amplio con techos a gran altura, con una buena ventilación y saneadas tras cada pase, lo que genera un volumen y espacio para el aire superior a otros locales. Las salas de cine confían que este verano sea un punto de inflexión en la recuperación del sector y que se incremente la asistencia de espectadores de forma progresiva.
La Junta aún no se ha posicionado al respecto. En la resolución que regula las restricciones propias del nivel 1 de alerta sanitaria en el que nos encontramos, se establece con claridad que "no estará permitida la ingesta de comidas y bebidas en la zona de butacas durante el espectáculo", aunque sí podría vender bebida y comida si tiene algún tipo de mesa habilitada para esa actividad.