Con temperaturas de 35 grados, o incluso superiores, en los colegios de la región lo pasan mal a la hora de dar clases. A la circunstancias meteorológicas se le unen, según las asociaciones de padres y madres de alumnos, las carencias de climatización en los centros educativos.
Dos ejemplos los encontramos en Badajoz y Mérida. En el colegio público Lope de Vega de la capital pacense, el AMPA se queja del calor que profesores y estudiantes sufren en las aulas, sobre todo en las superiores. En ellas se encuentran los escolares de 4 años.
Como explica Adrián Rodríguez, presidente del AMPA, algunos niños han llegado a sufrir golpes de calor. A pesar de ello, destaca, desde la Administración siguen sin darles una solución en forma de obras de acondicionamiento de las aulas o aparatos de climatización.
La potencia eléctrica
La alternativa que han pensado entonces es recurrir a ventiladores, pero, según dicen, la dirección del centro les ha comunicado que no se pueden enchufar, porque la potencia eléctrica no es suficiente y la instalación salta.
Desde la Consejería de Educación han asegurado que "no se tiene constancia de ninguna de estas quejas". Y añaden: "tampoco se tiene constancia de que la potencia eléctrica contratada en el CEIP Lope de Vega sea insuficiente".
La Consejería de Educación "no tiene constancia de estas quejas"
Mientras, apuntan desde el AMPA, algunos docentes de primaria se llevan neveras con polos y helados, y los reparten a los niños y niñas. "Lo hacen para refrescarlos, porque si no, es imposible", resume Adrián Rodríguez.
Venta de polos y helados
A los polos y helados también han recurrido en el colegio público Dión Casio de Mérida. La Asociación de Familias del Alumnado del centro ha montado un quiosquillo para venderlos a un módico precio.
El puesto lo montan en el patio los miércoles y viernes, durante el recreo de los escolares. El dinero recaudado lo destinarán a la compra de ventiladores, con el objetivo de que al menos haya dos por aula.
La situación de cada curso
Para Freampa Extremadura, que hace calor en junio es algo que se sabe, que en mayo, septiembre y primeros de octubre sigue siendo verano, también, y que muchas aulas presentan carencias de climatización, lo mismo. Por eso sostienen que la Junta de Extremadura llega tarde.
"Es necesario un plan de abordaje de una vez por todas. Estamos de acuerdo en que se establezcan prioridades, que todo no se podrá afrontar a la vez", explica Maribel Rengel, presidenta de Freampa en la región. Pero recuerda que "lo que no es de recibo es que esto se vea como algo puntual, cuando es año tras año lo mismo".
Freampa: "Es necesario un plan de abordaje de una vez por todas"
La Junta de Extremadura ya ha respondido. Su portavoz Victoria Bazaga ha manifestado que están trabajando en un plan para resolver estos problemas. No obstante, también ha señalado que por parte del anterior Gobierno "no se habían resuelto nada más que el 50 por ciento de las inversiones que habría que haber hecho".
Además de trabajar en un plan, la Consejería de Educación ha dado permiso a los colegios, previo informe favorable de su consejo escolar, para reducir o reorganizar horarios en caso de avisos por calor emitidos por la Agencia Estatal de Meteorología.