A pesar de ser de las regiones más seguras de España, la criminalidad aumentó casi un 11 por ciento en Extremadura en el primer trimestre del año. Según datos del Ministerio del Interior, en nuestra comunidad se cometieron de enero a marzo 8.600 delitos.
Las mayores subidas se registraron en las estafas informáticas y en el tráfico de drogas por la influencia de clanes chinos. Este alza del narcotráfico se ha concentrado, principalmente, en la provincia de Badajoz. Llama la atención que casi la mitad de estos delitos en esta provincia se han registrado en Almendralejo. Hasta 30 se contabilizaron en la capital de Tierra de Barros, cuando hace un año apenas fueron dos.
En la provincia de Cáceres, en cambio, los delitos que más se han incrementado son las estafas informáticas, que han subido un 50%. Estas ya suponen dos de cada diez infracciones en Extremadura.
En el lado opuesto de la balanza, los únicos que bajan en la región son los delitos contra la libertad sexual. Pasan de 68 casos a 56 en el primer trimestre de este 2023.