Para evitar que siga creciendo el número de víctimas mortales por accidentes de tráfico, la Unión Europea obligará a partir del verano a que todos los vehículos nuevos incorporen una serie Sistemas Avanzados de Ayuda a la Conducción. Uno de ellos es el Asistente de Velocidad Inteligente o ISA, por sus siglas en inglés. El asistente monitoriza el exceso de velocidad y alerta a quien conduce cuando sobrepasa la limitación impuesta en la vía
Es uno de los Sistemas Avanzados de Asistencia al Conductor, más conocidos como ADAS, que serán obligatorios en todos los coches matriculados a partir de julio. Hay otros más novedosos como la alerta de tráfico cruzado, la de cambio involuntario de carril o el frenado de emergencia.
Uno de los más conocidos es la cámara trasera. Se activa cuando metemos la marcha atrás. Y no sólo sirve para que aparquemos bien siguiendo las líneas auxiliares, sino también para detectar elementos que queden en ángulos ciegos y podamos reaccionar más rápido ante un objeto en movimiento.
Aunque nos hemos acostumbrado ya a la alerta de uso del cinturón o incluso al detector de somnolencia. Eso sí, de momento, todos pueden desactivarse