
La localidad valenciana de Buñol celebrará este miércoles, 27 de agosto, su tradicional Tomatina, en la que se lanzarán 120.000 kilos de tomates procedentes de Extremadura. La carga se realizó este martes en los camiones que repartirán el fruto por las calles del municipio en una fiesta que cada año atrae a miles de visitantes de todo el mundo.
Los tomates, de tipo pera y cultivados exclusivamente para la celebración, no son aptos para el consumo humano. El Ayuntamiento de Buñol contrató su suministro por 53.000 euros, tras un concurso público.
Una fiesta con impacto internacional
La Tomatina espera reunir a 22.000 participantes, además de los invitados oficiales, y volverá a colgar el cartel de “no hay billetes”. Según el consistorio, la fiesta supone un impacto económico directo de unos 300.000 euros para las arcas municipales, además de los beneficios indirectos en hostelería, transportes y festivales de la provincia de Valencia.
Con esta edición, la número 78, Buñol volverá a convertirse en epicentro mundial por un día, con visitantes llegados principalmente de India, Australia y distintas partes de España.