Es la última medida que queda para normalizar la convivencia con la COVID. Casi dos años después, las mascarillas dejarán de ser obligatorias también en el interior. Aunque en el trabajo serán las empresas las que tendrán que tomar la decisión en cada caso. Uno de los principales requisitos es que "haya distancia de seguridad, mamparas, filtros hepa y ventilación" según ha confirmado a Canal Extremadura Ángel Suárez, de Inprex. Suárez añade además que habría que salvaguardar a aquellos trabajadores vulnerables.
Desde el Servicio Extremeño de Salud apelan a la cautela en estos espacios. Su gerente, Ceciliano Franco, dice que "ya queda poco tiempo y que merece la pena ser cautos y dar pasos cortos, pero firmes".
En la hostelería y el comercio las mantendrán durante un tiempo
Los trabajadores de la hostelería, el comercio o las farmacias aseguran que ellos, al menos durante un tiempo las llevarán "por precaución y sobre todo por respecto al cliente y a las personas vulnerables que acudan a sus establecimientos".
La medida entrará en vigor el 20 de abril, tras la Semana Santa..