Lo avanzó el consejero de Sanidad José María Vergeles la semana pasada y hoy lo ha confirmado el presidente de la Junta de Extremadura. Guillermo Fernández Vara mantiene la hoja de ruta prevista a corto plazo.
Esa ruta pasa, en primer lugar, por que el área de salud de Plasencia baje a nivel 2 de alerta esta semana, de manera que toda la región cuente con las mismas restricciones. Está previsto que así lo apruebe el Consejo de Gobierno de la Junta este miércoles. Esto permitiría aumentar aforos y que bares, restaurantes y ocio nocturno puedan abrir hasta las 3 de la madrugada.
El siguiente hito llegaría la próxima semana, como ha indicado Vara. Extremadura bajaría de forma conjunta a nivel 1 de alerta. Por último, a la semana siguiente, ya a finales de mes, la región entraría en nueva normalidad.
En este escenario se suprimirían casi todas las restricciones, aunque habría que esperar también a ver de qué forma el Gobierno central adapta el Semáforo COVID en función del actual porcentaje de vacunación de la población.
Responsabilidad individual
Cuando Extremadura alcance la nueva normalidad será el momento de la responsabilidad individual. Así lo ha subrayado el presidente de la Junta, que en las últimas fechas viene insistiendo en que tenemos que aprender a convivir con el coronavirus como venimos haciéndolo con la gripe, por ejemplo.
En ese comportamiento individual Vara lo tiene claro: el mejor aliado es la mascarilla. "Que cada uno establezca en qué momento piensa que debe llevar puesta la mascarilla. Desde luego, totalmente en el próximo invierno", resalta el presidente extremeño.
Incidencia a la baja
En la relajación de las medidas influye, sin duda, el hecho de que la incidencia del virus en Extremadura sigue cayendo. Está situada en los 169 casos por cada 100.000 habitantes a los 14 días. Comparado con el lunes pasado, se ha reducido en 158 puntos.
También ha descendido el número de contagios de un fin de semana a otro. En concreto, a la mitad. En las últimas 48 horas, 123 personas han dado positivo y 9 han perdido la vida como consecuencia del virus. Cifras que nos van acercando a la ansiada nueva normalidad.
