Los ayuntamientos extremeños empiezan a fijar fechas para celebrar las primeras bodas civiles con invitados desde que se decretó el Estado de Alarma. El de Badajoz, por ejemplo, ya ha reservado el salón de plenos para el 6 de junio y el de Plasencia, para el 13. También habrá enlaces en el de Cáceres y Mérida. Aunque, desde la fase 1, ya han celebrado algún enlace, pero sólo para la firma y los novios y los testigos.
Las celebraciones religiosas, sin embargo, parace que se retrasarán hasta finales de julio o agosto. El día ocho hay una boda fijada en la catedral de plasencia y, en la segunda quincena del mismo mes, en la de Badajoz, la ermita de la Soledad o la Iglesia de San Agustín, algunas de las más solicitadas en la capital pacense.
Prefieren esperar
Ya se pueden celebrar bodas hasta con cien invitados en espacios abiertos o 50 si son cerrados. Pero, según apuntan los responsables de lugares de celebración, la incertidumbre ha hecho que la mayoría de los novios hayan preferido aplazar para final de año o incluso el año que viene.
Y es que en estos momentos, en la mayoría de los casos, tendrían que recortar el número de invitados, no podrían venir los de otras provincias, la mascarilla sería un complementos más y hasta deberían renunciar a los besos de enhorabuena o al viaje de novios.
FIRMA: Nina Flores
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