Varias localidades extremeñas aseguran que tienen problemas para mantener el servicio de ayuda a domicilio. La Junta ha cambiado el sistema de financiación, y en algunos municipios se ha dejado ya de prestar este servicio desde primeros de enero.
Es el caso de Guareña, en la provincia de Badajoz. Su ayuntamiento ha recibido una carta del SEPAD, en la que se le informa de la cantidad que le corresponde para mantener con la ayuda a domicilio, y que recibirá a través del programa de colaboración económica municipal. Pero el consistorio asegura que necesita el acuerdo oficial que lo garantice, y por eso los 80 usuarios de esta localidad no están recibiendo el servicio, y no continúa el contrato de las 18 trabajadoras que lo atendían.
La concejala de Familia y Mayores en Guareña, Marina Agraz, explica que "lo que sabemos es que va a haber un cambio de política y de programas, y lo que no tenemos en firme es un convenio de colaboración".
"El estado ahora mismo es de suspensión del servicio"
Agraz aclara que "sí queremos continuar con el servicio", pero esperan "una resolución oficial sobre la que podamos prestarlo en condiciones".
En otras localidades como Olivenza se mantiene el servicio con fondos propios, en espera del acuerdo con la Junta. Aunque si, cuando acabe el mes, no tienen oficialmente el compromiso de los fondos, también dejarán de prestarlo.
El gobierno regional, consultado sobre esta cuestión, remite al Pleno de la Asamblea que se celebrará este jueves, donde la Consejería informará al respecto.