El proyecto de la primera universidad privada de Extremadura, que quería estar en marcha en el curso 2025-2026, se está retrasando por la lentitud de los trámites administrativos. Hoy, el responsable de Uninde se ha reunido con el delegado del gobierno para pedir ayuda en la agilización de un proyecto que ha tenido el informe desfavorable del Ministerio de Universidades, que es obligatorio, pero no vinculante.
Ahora deberá pasar por el Consejo Económico y Social de Extremadura, y después por el Consejo de Estado antes de que sea aprobado con rango de ley en la Asamblea de Extremadura. Sobre los datos principales del proyecto destaca que presenta una oferta de diez grados, seis másteres y dos doctorados y dedica el cinco por ciento de su presupuesto a investigación. Además, la idea es que su campus principal esté en Badajoz, aunque con extensión en otras ciudades extremeñas como han trasladado a los alcaldes de Mérida y de Cáceres, dado que esperan que acudan "muchos" estudiantes de otras comunidades autónomas y de Latinoamérica.