La organización ecologista SEO/Birdlife ha calificado como "alarmante" la situación en la que se encuentra la población de avutardas en Extremadura, donde se ha constatado un declive en los últimos 20 años que duplica el descenso identificado a nivel nacional.
En concreto, el proyecto LIFE Agroestepas Ibéricas identifica las Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) de la región como una de las zonas con mayores declives en los últimos años, de modo que la especie se encuentra en situación de 'casi amenazada', según el Libro Rojo de las Aves de España publicado por SEO/BirdLife.
En términos numéricos, en el año 2002 en los Llanos de Cáceres habitaban en torno a 900 avutardas, mientras que en 2023 no se alcanzan las 350, según indica el delegado regional de la asociación, Marcelino Cardalliaguet, quien subraya que "en parte era algo esperado", ya que los programas de seguimiento de aves que desarrolla la organización desde hace décadas indicaban que existe un "descenso generalizado de las especies ligadas a ambientes agrarios".
En Extremadura, una de las regiones más importantes para la especie junto con Castilla-La Mancha y Castilla León, la situación se ha vuelto "alarmante", pues la región "duplica la disminución definida a nivel nacional por investigadores del CSIC", señala SEO/Birdlife en una nota de prensa.
Estas afirmaciones refuerzan la necesidad de ejecutar "medidas de importancia" como la redacción y aprobación de planes de gestión del hábitat o incluso el planteamiento de revisión de la catalogación a nivel regional.
Estas acciones ayudarán a las especies ligadas a los ambientes agroesteparios a una "recuperación de sus efectivos y a devolver el equilibrio a estos ecosistemas", donde se cree un "ambiente sano" que permita el mantenimiento de la biodiversidad "a todas las escalas".
El trabajo iniciado con el proyecto LIFE Agroestepas Ibéricas consiste en "unir fuerzas" entre agricultores, ganaderos, gestores de la administración y conservadores de la naturaleza y que se trabaje hacia "un objetivo común, devolver el equilibrio natural a los ecosistemas agroesteparios".
Para ello se implementarán esquemas agroambientales mediante acuerdos de custodia del territorio, cuyo objetivo sea preservar las áreas de importancia para las aves esteparias.
Igualmente, se abordarán preocupaciones socioeconómicas y se fomentará la recuperación de variedades de granos locales, lo que "no solo preserva la biodiversidad, sino también impulsa la economía agrícola local".
Para ello, se están promoviendo canales de comercialización "innovadores" que aumentarán el valor agregado de los productos realizados con estas harinas y "respaldarán a los agricultores y demandantes de cereales que quieran trabajar con productos locales, sostenibles y respetuosos con el patrimonio natural".