Se desplazaban en furgonetas desde Madrid para llevar a cabo estos delitos en diferentes puntos de España.
La Guardia Civil ha desmantelado un grupo criminal especializado en el robo de cable de cobre, al que se atribuyen 36 delitos cometidos en instalaciones de Badajoz, Cáceres, Valladolid, Burgos, Soria y Murcia. En el marco de la operación “Ibidem”, han sido detenidas e investigadas 18 personas, incluyendo los responsables de tres chatarrerías madrileñas acusadas de receptar el material sustraído.
Los robos afectaron especialmente a Extremadura, donde se llegaron a sustraer más de 6 toneladas de cable en instalaciones de Alange (Badajoz) y Torremocha (Cáceres). Concretamente, durante la investigación, la Guardia Civil interceptó una de las furgonetas que usaban para la comisión de los delitos. En ella encontraron 3.800 kg de cable de cobre que acababan de sustraer de la fotovoltaica del municipio de Alange. Vehículo que abandonaron al ser sorprendidos por los agentes. De igual forma, en Torremocha, abandonaron otros 3.000 kg de cable.

El grupo operaba desde Madrid, desplazándose en furgonetas propias o alquiladas para cometer los robos en explotaciones fotovoltaicas, bodegas, almazaras, aserraderos y fábricas agroalimentarias. En menos de 15 días llegaron a ejecutar casi una veintena de robos.
Durante la tercera fase de la operación, en octubre, se intervinieron más de cinco toneladas de cobre en las chatarrerías implicadas. En total, se estima que sustrajeron 65.600 metros de cable, valorados en 1,7 millones de euros.
A los detenidos se les imputan delitos de pertenencia a organización criminal, robo con fuerza, falsedad documental, usurpación de estado civil, uso ilícito de vehículos y receptación. Las diligencias han sido remitidas al Juzgado de Instrucción de Don Benito.
La Guardia Civil desarticula una red dedicada al robo de cobre en una operación liderada desde Extremadura