A Guillermo Fernández Vara le quedan ocho días al frente de la Junta de Extremadura, antes de que la popular María Guardia le sustituya en el cargo. El líder de los socialistas extremeños ha pasado por los micrófonos de Canal Extremadura Radio para hacer balance de su tiempo en el Gobierno y avanzar lo que puede suceder los próximos meses.
El presidente en funciones asegura que la transición de su Gobierno al de María Guardiola será "modélico". A la líder popular le desea "todo lo mejor en lo personal" pero reconoce que de su acuerdo con Vox le preocupa "lo que no se cuenta, que es lo que van a hacer". Al líder de los socialistas extremeños le parece "inaudito" que "por las mañanas se diga que se va a reforzar la sanidad o la educación y por la tarde se anuncie que se va a suprimir el impuesto de patrimonio de los más ricos". A su juicio esa dinámica es insostenible y asegura que, tal y como pasó con el gobierno del José Antonio Monago, "cuando gobierna la derecha lo público sufre".
Todos los grandes proyectos menos la azucarera
Fernández Vara reconoce que durante estos días ha mantenido encuentros con María Guardiola y con responsables de algunas de las grandes empresas con proyectos en la región para garantizarles que la región sigue ofreciendo las mismas oportunidades. De hecho, se muestra convencido de que todo lo anunciado saldrá adelante con una única excepción, la azucarera de Mérida. "Es el único proyecto que no acaba de estar del todo definido pero aún así, hay otros dos proyectos que se podrían ubicar en el mismo sitio y que incluso generarían más empleo".
El líder de los socialistas extremeños dice que cuando llegó al Gobierno en 2015 "le hubiera gustado encontrarse con un región como la que se va a encontrar María Guardiola", con unos datos tan positivos de empleo, cotizantes, deuda, pago a proveedores o proyectos industriales. Indica que la presidenta popular se va a encontrar con 3.500 millones del programa operativo de la UE para invertir y que su Gobierno podrá gestionar los 500 millones de ayudas europeas pendientes de solicitar de aquí a otoño.
Su futuro y el del PSOE
Fernández Vara dice que de los resultados de las generales del 23J dependerá si se va o no al Senado, aunque también le gustaría retomar su puesto de forense (ya solicitó su reingreso al Ministerio de Justicia) o retomar su tesis doctoral. Lo que es seguro es que no será el líder de la oposición ni de su partido. En octubre se celebrará un Congreso para elegir a sucesor y aunque el proceso debe pasar por unas primarias reconoce que preferiría que "sólo hubiera un candidato de consenso". Sobre este proceso indica que el PSOE "tiene banquillo" y asegura que no tiene ningún favorito.
Preguntado por qué diría si en el caso de que Pedro Sánchez, tras las elecciones, estuviera en disposición de gobernar y quisiera contar con él como ministro, ha respondido que como no se lo ha planteado "no sabe qué respondería". Lo que sí que ve más claro es que en los próximos comicios generales la diferencia entre el bloque de izquierda y el derecha será muy ajustado por lo que se muestra convencido de que para los socialistas "todavía hay partido".