Ser piloto de vuelo de ultraligero deportivo es algo más sencillo de lo que pueda parecer. Extremadura tiene, además, las condiciones ideales para volar en este tipo de aviones.
Hemos participado en una primera clase de vuelo en el Aeródromo de Mérida. `"Lo primero es comprobar las presiones de combustible, aceite, la temperatura del agua y todos los parámetros necesarios para despegar´ explica Luis Lechón, instructor de vuelo.
Enseguida despegamos, casi ni te das cuenta de que ya estás en el aire. Las vistas del lago de Proserpina, Mérida y su entorno son espectaculares. Al año, se pueden formar en este Aeródromo unos 80 alumnos, son clases teóricas y también prácticas, con un mínimo de 15 horas de vuelo.
El examen teórico se realiza en Madrid, en el Aeropuerto de Barajas, y para el práctico viene un instructor autorizado de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea.
El curso para ser piloto deportivo de ultraligero cuesta unos 3000 euros, y el mantenimiento de un ultraligero, afirman Lechón, es bastante menos que un coche.
La cultura del vuelo en Extremadura está creciendo, algo que ya es habitual en otros países europeos y en América. El camino está en marcha.