25 Noviembre 2025, 19:13
Actualizado 25 Noviembre 2025, 21:35

El futuro de la central nuclear de Almaraz ha vuelto a provocar un choque político, en esta ocasión, en el Senado. El senador Ángel Pelayo Gordillo ha acusado al Gobierno de querer cerrar la instalación por motivos “ideológicos” o “intereses espurios y ocultos”, y no por razones “técnicas, científicas, de seguridad o de interés general”. Gordillo ha advertido de que su partido intentará impedir “por todos los medios” que Extremadura “sea sacrificada en nombre del fanatismo climático”.

Respuesta del Gobierno

Desde el Ejecutivo, la vicepresidenta Tercera y ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, ha respondido con dureza. Ha pedido “actuar y trabajar de manera conjunta” frente al “fanatismo y negacionismo” que atribuye a Vox, y ha defendido que la lucha contra el cambio climático se basa en evidencia científica.

“Es ciencia en estado puro”, ha afirmado. “Las consecuencias del cambio climático serán sequías que arruinan cosechas, incendios, olas de calor, inundaciones, pérdida de viviendas y de vidas humanas”.

Aagesen ha remarcado además que solo uno de cada diez españoles no expresa preocupación por la crisis climática, y ha animado al diputado de Vox a informarse sobre la evidencia científica.