Este 26 de julio es el día marcado en el calendario para felicitar a todos los abuelos. Hoy, más si cabe, los más mayores de la casa siguen dándonos sabias lecciones de vida tras los duros meses de cuarentena. Ellos, lejos de perder el tiempo han sabido sacar el máximo partido a los largos de días de confinamiento.
Es el caso de Isabel Hernández y Antonio Cid, que con 77 y 71 años respectivamente, han proseguido sus estudios en la Universidad de Mayores de Extremadura. Una vez que las clases presenciales se suspendieron el 9 de marzo, esta pareja de Mérida decidió seguir su formación a través de su teléfono móvil, en contacto virtual con sus profesores. Ahora confían en retomar el próximo curso de forma presencial porque “nos gusta más ir a las clases que ‘on line’ (…) yo tengo mono”
“Nos gusta más ir a las clases que ‘on line’ (…) yo tengo mono”
En Zafra, Lorenzo Salguero ha pasado estos meses pegado al ordenador y ha compartido lo aprendido con sus compañeros de la Asociación de Voluntarios Informáticos Mayores de Extremadura. En septiembre, trasladarán todas esas actualizaciones a sus casi 300 alumnos en los primeros cursos telemáticos.
La gran mayoría insiste en que hay que aprovechar el tiempo. A Vicente Carrasco, un vecino de Badajoz de 70 años, las restricciones impuestas por el coronavirus le han permitido ordenar y catalogar su colección de más de 800 coches en miniatura.
