La XV edición de Emérita Lúdica ha vivido, esta pasada noche, una de sus jornadas más intensas, cuando el Anfiteatro Romano se ha transformado, tras caer el sol, en el escenario de las más feroces batallas de gladiadores. Bajo el título Gladiatura: de lo fúnebre al espectáculo, el público asistente se sumergió en un viaje al pasado con rigor y emoción.
Gladiatura en Mérida
“Es un honor poder estar aquí en este Anfiteatro Romano de Mérida representando las luchas que se hicieron aquí hace más de 2000 años”, afirma uno de los participantes, que encarnaba al dios del inframundo, Hades. “Para mí y mis compañeros es todo un honor representar esto delante de los ciudadanos de la antigua Augusta Emérita”.
Pero para quienes pisan la arena, la experiencia va mucho más allá de una simple representación. “Nosotros no actuamos, luchamos de verdad y tenemos toda una filosofía de vida detrás de esto”, explica uno de los gladiadores.
Desfile de las antorchas
El espectáculo no terminó con las luchas. El desfile de antorchas, que recorrió las calles de la ciudad, sumió a Mérida en una atmósfera mágica, donde la oscuridad se llenó de historia.
“Hay tantas actividades y un programa tan completo que a mí personalmente no me da tiempo a verlas todas”, señalaba uno de los asistentes. Esta gran variedad de actividades se tradujo en un gran ambiente en Mérida. “Hay muy buen ambiente y un gran número de participación, lo cual se agradece mucho”.
