Padres y sindicatos muestran este lunes su rechazo al cierre del colegio Juan XXIII de Mérida. Un cierre anunciado la semana pasada por la Junta de Extremadura.
Los sindicatos PIDE y CC.OO., que apoyan la protesta, aseguran que este cierre va en contra de la igualdad de oportunidades y de la escuela pública. De hecho están recogiendo firmas para evitar que se materialice este cierre.
El Movimiento por la Defensa de la Educación Pública Extremeña (Depex) ha afirmado que el cierre del colegio es la certificación del fracaso de las políticas educativas del Gobierno regional. Mas aún, han señalado en una nota, cuando en su misma zona hay centros educativos privados con las aulas "repletas" gracias a los conciertos.
A juicio de Depex, se trata de un fracaso porque son las decisiones de la Administración regional las que han impedido garantizar una escolarización equitativa y ofrecer al alumnado y a sus familias una propuesta inclusiva.
Desde la Junta justifican este cierre en la falta de alumnado y en las altas tasas de repetidores y de absentismo escolar. Actualmente en el centro estudian unos 30 alumnos y trabajan 6 docentes.
La Consejería de Educación asegura que serán recolocados en diferentes centros. En la zona donde actualmente está ubicado el Juan XXIII, hay otros tres colegios públicos y tres colegios más concertados.
La Junta cierra el colegio Juan XXIII de Mérida por la escasez de alumnos
