Febrero ha continuado el comportamiento lluvioso que se inició el en la segunda quincena del mes de enero. Con algunos paréntesis, ya el miércoles se intensificaron en la región y las precipitaciones continuarán, por lo menos, hasta el miércoles. De hecho, ha subido notablemente el caudal de los ríos del norte de la comunidad.
Desde hace unas semanas tenemos al anticiclón de las Azores ubicado en latitudes muy al sur del archipiélago que le da nombre. Esta situación facilita la llegada de centros de bajas presiones desde el Atlántico, dejándonos estos temporales de lluvia.
Y no parece que vaya a cambiar mucho esta situación. Según los modelos climáticos, que aún están en fase de desarrollo e investigación, muestran que febrero continuará con la misma tónica. Uno de los indicadores más usado es el índice NAO, abreviatura que proviene de Oscilación del Atlántico Norte y que indica la diferencia de presión atmosférica entre Islandia (donde es común que dominen las bajas presiones, las borrascas) y las Azores (dominada por las altas presiones).
Cuando este índice es negativo indica que el anticiclón está muy debilitado y es la circunstancia que da vía libre a la llegada de borrascas, como las que estamos teniendo prácticamente desde el otoño. Las previsiones marcan la misma tendencia. Así que habrá que tener el paraguas a mano en los próximos días. La segunda mitad del mes es bastante insegura, dada la dispersión de la salida de los modelos.
A día de hoy, y si todo se cumple, febrero será lluvioso en toda la parte occidental peninsular, incluida nuestra región. Los acumulados mensuales marcan una anomalía de precipitaciones por encima del 40% en la mayor parte de Extremadura y por encima del 100% (esto es, el doble de la media) en las comarcas más occidentales, así como en las estribaciones del sistema Central.
En el resto de la península, destaca el noroeste (Galicia, norte de Portugal y oeste de Castilla y León) donde también la lluvia mensual será entre 2,0 y 2,5 veces más alto de lo propio del mes. En cambio, por el Mediterráneo serán lo propio de la época del año.
En lado opuesto tenemos los países bálticos donde las borrascas apenas pasarán por allí debido al anticiclón de bloqueo que obligará a que las borrascas nos visiten.
El trasiego de borrascas por la península previsto para las próximas semanas nos dejará un tiempo, además de lluvioso, con temperaturas muy suaves. El régimen de vientos de oeste, conocidos también como ponientes, se caracteriza por traer aire bastante templado. De hecho, en Extremadura el valor medio de la temperatura mensual se quedará entre 0,5 y 1,0ºC por encima de lo habitual. Esta situación no excluye a que se dé aún algún episodio de frío y de heladas, pero de haberlo será poco duradero.
En cambio, febrero será muy cálido en toda la vertiente del Mediterráneo. Y es que el viento del oeste llega a estas comunidades reseco y calentado por efecto foehn disparando así los termómetros.
Enero fue calificado como húmedo en Extremadura por parte de Aemet
Como decíamos al inicio, en enero tenemos dos episodios de lluvias bien marcados. Por un lado, entre el 2 y el 11 con precipitaciones de carácter débil, por debajo de los 2-3l/m2. En cambio, en la segunda quincena fueron mucho más notables, con acumulados superiores a los 20l/m2 en varias estaciones en la jornada del día 20. Estas circunstancias han hecho que en el entorno del sistema Central se hayan superado los 200/m2 y los 100 en Los Ibores y en las sierras del sur pacense. En el resto de la región los pluviómetros han sumado entre 40 y 70l/m2 en general.
