Por segundo año consecutivo y debido a la pandemia, la Semana Santa no será la misma. No habrá procesiones ni viajes a lugares fuera de nuestra Comunidad y aunque no miraremos al cielo con el mismo nerviosismo, seguiremos pendientes de la meteorología.
Como ya sabemos, la Semana Santa no cae todos los años en las mismas fechas, depende de la luna. Se celebra después de la primera luna llena que tenga lugar tras el equinoccio de primavera. Por tanto, las condiciones meteorológicas y también las climatológicas pueden ser muy diferentes en función del momento de su celebración.
La primera luna llena de la primavera determina la fecha de la Semana Santa
Este año la primera luna llena que tendrá lugar el 28 de marzo ha determinado la Semana Santa entre el 28 de marzo y el 5 de abril. Y ¿qué tiempo suele hacer en esa época del año? La AEMET ha elaborado un estudio climatológico de esas fechas y esto es lo que dicen las estadísticas.
Ojo, es importante destacar que este estudio no debe ser tomado como una previsión para la Semana Santa 2021, es una media del tiempo acontecido en esa semana en los últimos 40 años.
¿Qué dice la climatología?
Si nos centramos en las temperaturas, la recta final de marzo y los primeros días de abril suelen dejar una temperatura media en Extremadura entre los 12 y los 14 grados. En zonas como las Vegas del Guadiana incluso con valores más elevados, entre los 14 y los 16 grados. Las máximas suelen registrar temperaturas en nuestra región entre los 18 y los 22 grados, mientras que las mínimas se mueven entre los 6 y los 8 grados en zonas medias y llanas.
En cuanto a las precipitaciones, la cantidad acumulada en esta época en Extremadura puede oscilar entre los 10 y hasta los 20 mm y suele haber cuatro días de precipitación, lo que supone que llueve en un 40% del periodo estudiado. Los días en los que más suele llover son el 4 de abril, el 30 de marzo y el 2 de abril y los meteoros que destacan son la lluvia, la niebla, las tormentas o el granizo.
Las estadísticas apuntan a que en esta semana suele haber entre siete y ocho horas de sol diarias en Extremadura.
Los años extremos
Ya sabemos que la primavera es una época de “saltos en el tiempo” con episodios de calor que nos anuncian el verano, pero también con los últimos coletazos del invierno.
Es por esto por lo que ha habido años muy dispares dentro del periodo analizado. Por ejemplo, en Badajoz el 5 de marzo de 1999 se llegó a registrar una máxima de 30,8 grados, mientras que en el año 1988 apenas se registró una temperatura de 8,4 grados de máxima.
En 1992 en la estación de Cáceres se asomaron a los 80 mm de precipitación acumulada.
Como vemos, la variabilidad caracteriza tanto a la primavera como a esta semana del calendario, de ahí que las previsiones de Semana Santa sean habitualmente complejas y estén llenas de incertidumbre.