Regina es la joya romana de la Campiña Sur y allí espera, paciente, a que desentierren todo lo que quiere enseñarnos. Los últimos privilegiados en acariciar sus tierras y removerlas para conocernos un poco más han sido arqueólogos de las universidades de Viena, Marburg y Cantabria. Dicen que es una exquisitez excavar en ese yacimiento y que no esperaban la sorpresa que han encontrado.
Se trata de un edificio de 150 metros de largo, con 2 metros y medio de profundidad y con una colección de 30 ánforas completas: "y tienen dentro salazón. Lo que quiere decir que comerciaban con la costa gaditana. Probablemente con Baelo Claudia", explica el arqueólogo alemán Félix Teichner, de la Universidad de Marburg: "probablemente era un almacén. O una pescadería. Un negocio, sin duda, muy especializado". Pero un negocio que, además, estaba situado en el fin del Decumanus, es decir, cuando acababa la ciudad, seguramente pegado a la muralla. Y a partir de ahí, todo un mundo por descubrir.
Edificios, asas de vasijas, monedas...
Con georadares, los arqueólogos han localizado más de diez edificios a las afueras, en lo que sería la periferia de Regina: "hemos encontrado varios edificios: pequeñas granjas pero también grandes villas", nos cuenta Günter Schörner. Como una situada a solo unos kilómetros, en la que se sabe además que hay un gran mosaico.
Estudiantes de las universidades de Alemania y Austria, guiados por los arqueólogos de Marburg, Viena y Cantabria, han encontrado además una fíbula, mucha cerámica, asas de vasijas y muchos otros objetos de la vida cotidiana más allá del casco urbano. También dos monedas de plata "que son muy raras dentro de un casco urbano. Lo normal es encontrar monedas de bronce, pero las de plata eran mucho más costosas y se solían buscar si se perdían. Es como si pierdes un céntimo o pierdes un euro. El euro lo buscas, el céntimo no tanto", expone Víctor Martínez, arqueólogo de la Universidad de Viena.
¿Era entonces Regina algo más que la administradora de las minas del emperador, como se ha pensado siempre? El alcalde de Casas de Reina, donde se ubica el yacimiento, Agustín Castelló, cree que no: "estos últimos descubrimientos nos hablan de una ciudad más mucho más extensa".
En esta última excavación, han aparecido además restos de lo que podrían ser unas termas. Si fueran públicas, serían las segundas. Falta corroborarlo. Pero si hay un Teatro para 1.200 personas, por qué no más baños públicos. Sería lo normal. Sería lo lógico que hubiese incluso alguna sorpresa más.