Cuestión de un trámite burocrático. Es lo que impide actualmente que el matadero de Olivenza recupere la actividad. La nueva empresa gestora de las instalaciones llegó a la región en mayo, pero todavía falta el preceptivo registro sanitario que otorga la Junta para que puedan funcionar.
El nuevo grupo gestor está formado por una sociedad de empresarios irlandeses y españoles, y desde que se encuentran en Olivenza han invertido ya más de 200.000 euros. Lo han hecho en la mejora de las instalaciones, un nuevo sistema de tratamiento del agua y la modernización de la refrigeración del recinto, entre otras.
Explican que no pueden empezar a trabajar, ya que necesitan la autorización de la Consejería de Sanidad. Desde la Administración regional, según la versión de la nueva empresa, no se la dan porque antes reclaman que el anterior gestor firme la baja de su registro sanitario.
Los nuevos gestores no entienden esta postura, porque destacan que ya han acreditado que la anterior empresa no mantiene ya ningún vínculo con el matadero. Además, insisten, cumplen con todos los requisitos sanitarios.
Potenciales clientes
La nueva empresa dice que ya tiene ganaderos extremeños interesados en vender sus animales y clientes potenciales en Inglaterra, Irlanda, Francia e Italia. Pero se están cansando y podrían perderse.
Si no se resuelve pronto el problema del registro sanitario, el nuevo gestor lamenta que tendría que marcharse. Y con su retirada los ocho trabajadores actualmente en plantilla se irían a la calle.
Ya habría potenciales clientes en varios países de Europa
Los empleados se han organizado y van a presentar un escrito pidiendo a la Junta que agilice los trámites. Entienden que la nueva empresa ya está invirtiendo dinero desde hace meses y que no podrá mantenerlos en sus puestos de trabajo mucho más.
Entre 50 y 100 empleos
Según la nueva empresa encargada de explotar el matadero, cuando esté a pleno rendimiento -en torno a un año o año y medio desde que entre en funcionamiento- necesitarán entre 50 y 100 trabajadores. La previsión es que en ese punto de máxima actividad puedan sacrificarse bajo el rito halal alrededor de 700 cabezas de vacuno y casi 4.000 de ovino y caprino cada semana.
El matadero de Olivenza lleva sin funcionar desde diciembre de 2023 tras ser precintado porque la anterior empresa no cumplía las normas sanitarias. Anterior empresa que además mantiene todavía una deuda de más de un millón de euros con varios ganaderos y proveedores.
El matadero de Olivenza debe más de un millón de euros a ganaderos