implantes intratecales
La Unidad del Dolor Crónico Intervencionista del Área de Salud de Don Benito-Villanueva de la Serena ha realizado con éxito el implante de la primera bomba intratecal, destinada al tratamiento de la espasticidad severa, un trastorno motor discapacitante asociado a múltiples enfermedades.
Según informa la Junta, este dispositivo se implanta en el abdomen con un catéter que se dirige directamente a la médula, y se utiliza también para tratar el dolor refractario a todo tipo de tratamientos con otro tipo de medicación.
Actualmente la Unidad del Dolor de esta área de salud "es pionera en Extremadura en el implante y seguimiento de esta tecnología enfocada para el tratamiento de este tipo de pacientes", señala la Junta.
Espasticidad Severa
El origen de la espasticidad severa se encuentra en una alteración del sistema nervioso central que provoca un aumento del tono muscular, dificultando y o imposibilitando, total o parcialmente, el movimiento de los músculos afectados.
La sintomatología que produce es similar a una contractura muscular mantenida y dolorosa. La espasticidad no controlada es un síntoma muy perjudicial para el paciente, ya que además de generar dolor, ocasiona mayor incapacidad y dificultad para el autocuidado.
Esta sintomatología está presente en muchas patologías, por ejemplo la parálisis cerebral, la espina bífida, el daño cerebral adquirido, el ictus, la esclerosis múltiple, la esclerosis lateral amiotrófica, las ataxias, traumatismos cráneo encefálicos, etc.
Cuando el tratamiento oral no soluciona la problemática asociada a este síntoma, se debe optar por el intervencionismo para depositar la medicación en el espacio medular directamente.