El dato es esperanzador: 240 hectómetros cúbicos más de agua disponible para riego en menos de 10 días. Las últimas lluvias cubrirían, según Confederación Hidrográfica del Guadiana, el 53% de la superficie de riego. Algo que da un respiro a las comunidades de regantes que a poco menos de dos meses para empezar la campaña vaticinaban un desastre con las reservas al mínimo. Eso sí, insisten en que hay mucha cantidad que sigue perdiéndose porque sigue faltando regulación bajando de la zona de Montijo.
Desde Confederación aseguran que todavía no estarían garantizados todos los cultivos de regadío pero se abre una luz. E inciden en el buen trabajo que están realizando desde las comunidades de regantes en el ahorro de agua. Casi 600 hectómetros cúbicos disponibles para riego, pero con la cuenca del Guadiana todavía sobre el 26% de su capacidad. Por ello los regantes ven fundamental el trasvase desde el Tajo.
Entre finales de marzo y principios de abril volverán a reunirse de nuevo para actualizar la situación antes de iniciar la campaña.
