Vuelven los impagos al ayuntamiento de Alburquerque. El alcalde ha sido contundente: la asfixia financiera del consistorio continúa, y no hay dinero ni para pagar la nómina de septiembre de los trabajadores.
Así que otra vez son los empleados municipales los que pagan la crisis. Les han dicho que hasta enero no cobrarán sus nóminas, y además nadie les asegura que el dinero no cobrado se pueda recuperar en los primeros meses de 2024.
Desde el ayuntamiento argumentan que tras pagar el gasto corriente y los préstamos, se han quedado sin liquidez.
La deuda es de alrededor de 12 millones de euros. Casi todo el importe de esa deuda es dinero público, por lo que el consistorio pide al Ministerio su renegociación, o que se la condonen.
"Si nos condonaran esta deuda, acabarían todos los problemas de este pueblo", apunta el alcalde.