Desde el pasado sábado, más de un centenar de viviendas en Malpartida de Plasencia están sin suministro de gas, afectando a unos quinientos vecinos, así como a varios negocios que han tenido que detener su actividad.
Negocios paralizados por la falta de gas
Cristina Curiel, propietaria de una lavandería en el municipio, se enfrenta a una situación complicada: “Yo tengo unos plazos que cumplir. Los fines de semana es cuando más volumen de trabajo tengo y he tenido que bajar a Plasencia a las lavanderías de pago para secar la ropa y cumplir con mis clientes”, explica.
Apañándose como pueden
La falta de suministro también afecta a la vida cotidiana de los residentes, quienes se ven obligados a improvisar para cubrir necesidades básicas como cocinar, ducharse o calentar sus hogares. Antonio Oliva, uno de los vecinos afectados, lamenta que no pueden guisar, ni tener calefacción ni ducharse. "El alcalde se puso en contacto con la empresa y muchos vecinos también, pero dicen que nadie les coge el teléfono", añade.
El Ayuntamiento, al lado de los afectados
Ante esta situación, el alcalde de Malpartida de Plasencia, Raúl Barrado, asegura que están apoyando a los vecinos en sus gestiones con la empresa de suministro: “Nosotros como ayuntamiento nos hemos adherido a esas quejas. He llamado a la empresa y nos hemos prestado para ayudarles en las tramitaciones de quejas".