En casa de María, vecina de Casar de Cáceres, ya no tendrán que sortear quién saca la basura cada día. Solo habrá que dejarla en la puerta. El motivo es un nuevo sistema de recogida selectiva de residuos, el denominado 'puerta a puerta'.
Esto propiciará que más de 300 contenedores comunitarios desaparezcan del paisaje urbano del municipio cacereño. Cambiarán por un kit de cubos individuales asociados a cada vecino o vivienda. De momento se les ha repartido dos cubos, uno para los deshechos orgánicos y otro para los envases.El que no lo cumpla o lo haga indebidamente puede afrontar sanciones que alcanzan los 700 euros.
Se trata de un método que no agrada a todos los casareños. También los hay que aún continúan familiarizándose con él.
Este tratamiento de los residuos es puntero la región y busca alcanzar los índices de reciclaje marcados por la Unión Europea.