Termina el juicio contra el acusado de matar a golpes a su vecina en Cabezabellosa. Está previsto que esta tarde el jurado popular emita su veredicto.
En la última sesión, el acusado ha hecho uso del derecho a la última palabra para pedir perdón a la familia de la fallecida de 85 años.
Fiscalía y acusación mantienen su petición de pena
Durante la mañana, las partes han expuestos sus conclusiones finales. La fiscalía y la acusación particular mantienen su petición de pena de 25 años de cárcel por asesinato, al considerar que ha quedado probado que el acusado tenía un móvil y que planificó el crimen.
"Ha quedado probado el ensañamiento con la víctima, a la que golpeó repetidamente y con gran violencia"
El abogado de la acusación ha aludido además a que "ha quedado acreditado el ensañamiento con la víctima, a la que golpeó repetidamente y con gran violencia". Fiscal y abogado, no obstante, admiten la eximente incompleta al entender que el hombre actuó bajo los efectos de las drogas.
"Lo único que ha quedado acreditado es que mi cliente está enfermo y que esa noche sufrió un brote psicótico que terminó con el fatal desenlace"
La defensa, por su parte, considera que "lo único que ha quedado contundentemente acreditado con los informes forenses es que mi cliente está enfermo y que esa noche sufrió un brote psicótico que terminó con el fatal desenlace". También ha señalado que el acusado siempre se ha mostrado colaborador y arrepentido con lo que hizo. Por todo ello, solicita para él la reclusión en un centro psiquiátrico y no, el ingreso en prisión.
El veredicto se conocerá esta tarde
Por último, el acusado del crimen ha tomado la palabra al final para, mirando a los familiares que se encontraban en la sala, pedirles perdón y mostrar nuevamente su arrepentimiento. Un gesto que ha repetido después, cuando los agentes de la policía se lo llevaban de la sala de vistas.
Está previsto que el jurado popular, compuesto por nueve miembros, dictamine en las próximas horas su veredicto sobre la culpabilidad o no del acusado. Veredicto, a partir del cuál, el presidente del tribunal deberá dictar sentencia.