Esta persona falsificó supuestamente certificados de citas médicas de dos de sus alumnos, con el objetivo de que pudieran examinarse para la obtención del Certificado de Aptitud Profesional
La Guardia Civil de Cáceres investiga al responsable de una autoescuela de la provincia por falsificar certificados de citas médicas de sus alumnos, por lo que ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial como supuesto autor de un delito de falsedad documental, para el que se contempla una pena de prisión de 6 meses a 3 años y multa de 6 a 12 meses.
Esta persona falsificó supuestamente certificados de citas médicas de dos de sus alumnos, con el objetivo de que pudieran examinarse para la obtención del Certificado de Aptitud Profesional (CAP) en una fecha y en una sede distinta a la que le correspondía.
Las investigaciones llevadas a cabo por agentes del Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico (GIAT), y en las que ha colaborado el Servicio de Inspección de Transportes de la Junta de Extremadura, comenzaron tras tener conocimiento de unas supuestas irregularidades cometidas por una autoescuela cacereña.
La inspección efectuada a la documentación, en relación a los aspirantes y a la obtención de la prueba CAP, puso de manifiesto irregularidades en varios justificantes de citas médicas aportados por una de ellas “que de haber pasado inadvertidas hubieran permitido el cambio de fecha y sede del examen para dos de sus alumnos”.
En nota de prensa, la Guardia Civil ha recordado que el CAP es una formación obligatoria, que deben obtener todos los conductores profesionales de camión o autobús que se hayan sacado el carné de conducir vehículos pesados como el C o el D (cualificación inicial CAP), el cual habrá de repetirse cada cinco años (Formación continua CAP). Después de realizar el curso de cualificación inicial, los aspirantes al CAP deberán superar un examen, antes de 12 meses (desde que finalizó el curso), pudiendo presentarse al mismo en cualquier Comunidad Autónoma.
Señala que con ello se pretende conseguir conductores profesionales mejor cualificados y adaptados a las nuevas exigencias del mercado de transportes por carretera y, en definitiva, mejorar la calidad y seguridad tanto del tráfico, como de los propios conductores.