Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes al SEPRONA de Trujillo han investigado a cinco personas (cuatro adultos y un menor), por un supuesto delito contra la fauna, al serles localizados, cuando viajaban en un vehículo por la Autovía A-5, trece pollos de cernícalo primilla y dos perdices, vivas, así como una liebre muerta.
Los integrantes del vehículo no aportaron ningún dato acerca del origen de los animales, los cuales parecían haber sido expoliados de sus nidos. Tras poner los hechos en conocimiento de los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de Trujillo, estos se hicieron cargo de la instrucción de las correspondientes diligencias, por un presunto delito contra la protección de la fauna, haciendo entrega de los animales al Servicio de Conservación de la Naturaleza de la Junta de Extremadura, para su remisión al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre “Los Hornos”, de Sierra de Fuentes.
Cernícalo primilla
El cernícalo es una pequeña rapaz de la familia de los halcones, que hace sus nidos en grietas de rocas o edificios, antiguos nidos de córvidos, huecos de árboles o directamente sobre el suelo, realizando sus puestas mayoritariamente en el mes de junio, siendo una de sus mayores amenazas el expolio de sus nidos. De hecho, el último censo elaborado por la asociación conservacionista SEO/Birdlife, en colaboración con la Junta de Extremadura, muestra que las poblaciones de esta pequeña rapaz se han reducido a la mitad en una sola década.
Este falcónido está protegido por un Real Decreto. Del mismo modo, esta especie queda amparada por la legislación extremeña, de acuerdo a lo establecido en el Decreto 37/2001, de 6 de marzo, por el que se regula el Catálogo Regional de Especies Amenazadas de Extremadura, al establecer que el cernícalo primilla se encuentra incluido en la categoría “sensible a la alteración de su hábitat”